No soy un cuerpo. Soy libre. Pues aún soy tal como Dios me creó.
1. (188) La Paz de Dios refulge en mí ahora.
2Permaneceré muy quedo y dejaré que la tierra se aquiete junto conmigo. 3Y en esa quietud hallaremos la Paz de Dios. 4Está dentro de mi corazón, el cual da testimonio de Dios Mismo.
5No soy un cuerpo. 6Soy libre. 7Pues aún soy tal como Dios me creó.